
Una conversación que se retoma veinte años más tarde, tres días de convivencia con el escritor y un largo diálogo. Alonso de los Ríos dispara preguntas sobre la obra y sobre todo la vida de un autor diferente que alcanzó el éxito de crítica y público con una personalidad no precisamente jovial, donde el mundo rural invade buena parte del conjunto de sus obras.
Hablaba Aidan Chambers de las relaciones que se crean a través de la lectura, siendo una de ellas la que se crea entre un libro y otro. Y es que al título que nos ocupa he llegado leyendo a Delibes, cuando menciona los grandes periodistas con los que formó equipo en El Norte de Castilla durante muchos años. Carmen Martín Gaite, otro premio Nadal como Delibes, también destacaba los hilos que unen a unos títulos con otros, así como a los lectores entre ellos a través de gustos similares, a las relaciones que existen entre escritores, contemporáneos o no. Una cosa lleva a la otra y… ya se sabe.
En estas páginas hay periodista y entrevistado y, un poco apartada, la amistad que los une, que no interfiere ni mancilla el carácter de las preguntas que poco a poco nos permiten ir conociendo las convicciones personales del escritor vallisoletano, su visión de un mundo que agoniza desde hace mucho, y cuyos síntomas (el progreso sin medida, la intransigencia, el abandono social de un estilo de vida que él había mamado desde pequeño y que amaba o el carácter cada vez más bélico de la relaciones entre instituciones locales, nacionales e internacionales) le preocupaban hasta la amargura, teniendo un carácter ya de por sí fatalista.
En definitiva, sirvan ésta obra, la considerada más relevante del escritor y periodista, para conocer mejor al hombre detrás de novelas tan conocidas (y queridas) como El camino, Las ratas o Señora de rojo sobre fondo gris, parte importante de la literatura española en el siglo XX.
Como muestra un botón:
-En tu primer libro, Miguel, se advierte una sensibilidad especial hacia el tema de la muerte, que luego será una constante en tu obra.
-Bueno, en realidad, cuando describes las vidas de unos seres, la muerte es algo inevitable, algo que fatalmente tiene que producirse, puesto que la muerte está en la punta de la vida. De todos modos, tienes razón. La muerte es una constante en mi obra. Yo diría más. Diría que es una obsesión.
-¿Hay algún hecho en tu infancia que lo explique?
-Sí. Ya de niño ya me ocurría, por ejemplo, que al llegar a las escaleras de mi casa me imaginaba que un día bajarían por allí el ataúd con el cadáver de mi padre. Estas imaginaciones que reservaba para mí y no confiaba a nadie, se repitieron hasta convertirse en una obsesión.
César Alonso de los Ríos (Palencia, 1936 – Madrid, 2018) fue un periodista español de vasta cultura. Trabajó como colaborador en diarios emblemáticos como El Norte de Castilla (dónde formó plantilla con Miguel Delibes o Manuel Leguineche), Cambio 16 o ABC. El lector puede encontrar mas información sobre su vida y tendencias literarias y políticas en este obituario de el diario El Mundo del 3 de mayo de 2018, dos días después de su muerte.
CSDL
Datos del libro
Título: Conversaciones con Miguel Delibes
Autora: César Alonso de los Ríos
Editorial: Destino
Páginas: 194
Fecha de edición: 1995
ISBN: 978-8423324897
Precio: 10€ (2ª mano)