No he tenido mucho tiempo para leer en los últimos meses, por lo que esta lectura ha sido doblemente gratificante. Por un lado, por retomar el placer de la lectura antes del sueño, y por otro, porque he tenido entre manos una novela magnífica.
A través de la memoria del narrador, Dunstan Ramsay, nos adentramos en su compleja personalidad y en los acontecimientos y relaciones personales que marcarán su vida. A medida que avanza la historia, diferentes situaciones darán lugar a una trama de misterio que continúa con la segunda y la tercera parte de la que se conoce como Trilogía de Depford. Precisamente allí, en Depford, el pueblo canadiense donde nace Dunstan, comienza la evocación del protagonista con un recuerdo bastante insólito: una –aparentemente– inocente bola de nieve golpea con fuerza a una vecina, la Sra. Dempster, provocándole un parto prematuro y un desequilibrio mental perpetuo. Ante este suceso se presentan dos personajes antagónicos que tomarán caminos opuestos en la vida: el propio Dunstan, que cargará toda su vida con la culpabilidad de haber esquivado la bola que en realidad iba dirigida a él, frente a Boy Stauton, quien lanzó la bola y jamás se responsabilizará de aquel desafortunado accidente, y ni siquiera recordará a la pobre mujer y a su hijo, Paul.
La novela es especialmente interesante por la agudeza con que Dunstan retrata a los habitantes de su pueblo, en concreto sobre su escrupulosa moral y su puritanismo religioso. En su narración, Dunstan va descubriendo la riqueza de los grises de la vida a través de diálogos absorbentes y sucesos inesperados. De fondo, se percibe cómo el protagonista lucha constantemente contra su herencia cultural a la vez que no puede huir de su propio pasado.
Os dejo un fragmento:
¿Habré conseguido plasmar algo de aquella extraordinaria noche en la que nació Paul Dempster? Estoy seguro de que mi pequeño esbozo de Percy Boyd Stauton es exacto, pero ¿qué hay de mí? Siempre me he burlado de las autobiografías y memorias en las que el autor aparece al principio como un encantador e inteligente jovencito, lleno de una perspicacia y una agudeza que ofrece con falsa ingenuidad al lector, como si pretendiera decir: “Yo era una maravilla y, a la vez, un niño”. ¿Tienen los escritores alguna noción o algún recuerdo real de lo que es un niño? Yo lo tengo, y lo he reforzado durante cuarenta y cinco años de dar clases a los niños. Un niño es un hombre en miniatura, y aunque a veces pueda mostrar una notable virtud, así como características que pueden resultar encantadoras por lo ingenuo, también es intrigante, egoísta, traidor, judas, sinvergüenza y villano; en pocas palabras: un hombre”.
Robertson Davies (1913-1995) murió siendo un escritor mundialmente famoso y uno de los autores canadienses más importantes.
Datos del libro
Título – El quinto en discordia
Autor – Robertson Davies
Año de publicación – 2016 (10ª edición)
Editorial – Libros del Asteroide
Precio – 18.95 €
Páginas – 360
ISBN – 9788493431563